sábado, 19 de septiembre de 2015

Tours. Francia.


Considero que hay tres lugares, que deben visitarse en una ciudad,  determinan su carácter, los mercados,  tiendas y comercios que mantienen la estabilidad del estómago y la subsistencia, las catedrales e iglesias que siendo creyente o  no manifiestan la posición del ser humano en una época  frente a lo eterno,  mantienen  la inmortalidad de las  ideas mediante esculturas, vidrieras, arcos o capiteles, son libros abiertos a la historia.

Por último los cementerios lugares que siempre encuentro cuando me pierdo y tengo que dar la vuelta por que se acaba el camino,  en el mejor de los sentidos.

Tours  está bañada por el río Loire  fue capital del reino de Francia en los siglos XV y XVI  mantiene su esencia  en  el barrio  “Vieux Tours”, remodelado en 1962 con un importante  patrimonio cultural y arquitectónico  observamos casas  medievales  en   la  “Place  Plumureau”.





Si hay un monumento que destaca en Tours  es la catedral de Saint-Gatien  construida entre 1160 y 1547 de impresionante altura.  La fachada principal  presenta una decoración  de estilo flamígero, pero si hay algo que destaca es la gran cantidad de vidrieras realizadas en los talleres Lobin, maestro vidriero del  s. XIX.






















Cueva de Santimamiñe. País Vasco.


Uno de los rincones más interesantes del País Vasco y no muy conocido es la cueva de Santimamiñe ubicada en Cortézubi, cerca de Guernica (Vizcaya) en la falda del monte Ereñozar.
En ella, hay restos y pinturas datadas en el Paliolítico Superior (Magdaleniense, 14.000-9.000 años a.d.c.). Está incluida en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.
Los paseos por el entorno nos hace pensar cómo pudo ser el hábitat hace unos 15.000 años, forma parte de un conjunto de yacimientos prehistóricos en la cornisa atlántica.




jueves, 17 de septiembre de 2015

Fotografía con cámara reflex y microscopio. Mosquito tigre (Aedes albopictus).



Es posible realizar una fotografía de cierta calidad utilizando un microscopio no adaptable a cámaras reflex. En este caso la fotografía corresponde al mosquito tigre (Aedes albopictus), ha permanecido guardado durante 1 año y este este es el aspecto que presenta:


Realizada a foco directo, cámara Canon 600D,  objetivo del microscopio X4.
ISO 400 - 1/80 segundo.



Realizada a foco directo, cámara Canon 600D,  objetivo del microscopio X10.
ISO 400 - 1/80 segundo.



El microscopio es el Bresser Biolex NG, le he quitado el prisma superior que sostiene el ocular al ser de 1 pulgada además dejaba pasar muy poca luz. En su lugar adapté un tubo de PVC de 40 mm de diámetro externo y 1 1/4 de pulgada de  diámetro interno (equivale a 31´75 mm).

Para conectar la cámara  reflex (Canon 600D) he usado un rosca T2 de conexión y un adaptador de 2" a 1 1/4 ", que normalmente utilizo para los telescopios en astronomía.





El sistema conectado y listo para su utilización.